La Basílica inició la Cuaresma con la misa «Sent la Creu»
Publicador de contenidos
La Sagrada Familia acogió ayer la celebración de la misa «Sent la Creu», con la que, además, se inició la Cuaresma, de manera que esta efeméride se compartió con los más jóvenes de la diócesis de Barcelona. La eucaristía, el acto central del Plan Pastoral Diocesano, que este año está dedicado a los jóvenes, estuvo presidida por el Arzobispo de Barcelona, el Cardenal Joan Josep Omella i Omella, y concelebrada por los obispos auxiliares de Barcelona, Mons. Sergi Gordo y Mons. Antoni Vadell; por el obispo de Moramanga (Madagascar), Mons. Rosario Vella, y por el obispo de Bangassou (República Centroafricana), Mons. Juan José Aguirre.
De esta localidad procedía también la cruz que presidió la misa y que era un símbolo de la lucha contra la violencia entre musulmanes y cristianos que se vive en estos territorios. La iglesia cristiana, que ha tenido que hacer de escudo humano en los enfrentamientos, ha defendido a las víctimas. Durante la eucaristía, de hecho, se pudieron escuchar testimonios de esta situación.